¿Qué hacer si mi lavadora huele mal?

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Uno de los electrodomésticos que más usamos en casa es sin duda, la lavadora, esto debido a que es un artefacto que facilita las labores para el aseo de nuestras prendas de vestir y también porque nos ahorra mucho tiempo. En ese sentido, debemos tener en cuenta cualquier detalle para evitar su desperfecto y así no complicarnos la vida.
Dentro de los cuidados que debemos tener con nuestra lavadora, es lo referido a los olores que pueda emanar, ya que ello puede significar alguna señal de que algo no anda bien en su funcionamiento. Si nuestra lavadora huele feo, no debemos pasarlo por alto, caso contrario podemos arriesgarnos a gastar mucho dinero en repararla o incluso vernos obligados a desecharla.
¿Por qué huele mal la lavadora?
Las lavadoras acumulan suciedad con el paso del tiempo y de los lavados. También la falta de ventilación y la ausencia de cuidados específicos pueden contribuir a que la máquina desprenda cierto olor desagradable, incluso pasarlo a la ropa que luego vestiremos.
Para evitarlo, toma nota a los siguientes consejos para que cuides tu lavadora:
Si percibes cierto olor un tanto desagradable en el interior del tambor de tu lavadora, haz un lavado corto a más de 30 ºC, usando únicamente medio litro de vinagre blanco. Este ingrediente es capaz de acabar con las bacterias presentes en la máquina y elimina así cualquier resquicio de mal olor.
Otra opción que puedes emplear, es la de hacer un lavado con lejía, que también funciona efectivamente para la eliminación de las bacterias. Si prefieres esta opción, lo recomendable es que el siguiente lavado con ropa que hagas, sea solo con prendas blancas, pues si queda algo de producto en el interior del tambor, podría estropear la ropa de color.
Además, y para asegurarte de que has terminado con el problema, después de hacer cualquiera de los dos lavados anteriores, coloca un recipiente lleno de bicarbonato de sodio dentro del equipo. El bicarbonato ayudará a absorber el mal olor y acabar de dejar tu lavadora completamente fresca.
Consejos para que no vuelva a oler mal tu lavadora
Ahora que ya has terminado con el olor y tu ropa está a salvo, lo importante es asegurarse de que no vuelva a suceder. Y para ello, lo mejor es seguir una rutina constante de mantenimiento que asegure el buen funcionamiento de la lavadora.
Estas medidas pueden ayudarte:
Cuando la lavadora no esté en uso, lo mejor es que dejes abierta la puerta del tambor para que no se concentre la humedad y no aparezca moho.
Es importante limpiar la goma periódicamente con uno de los muchos y variados limpiadores para el hogar que hay en el mercado, pues es una zona donde se suele acumular suciedad tras los sucesivos lavados.
Lo mismo sucede con el filtro y los cajetines del detergente y suavizante. Eso sí, antes de hacerlo sigue estrictamente las indicaciones del fabricante.
Secar el tambor también es una práctica que debes incluir en tu rutina de limpieza de la lavadora, pues la humedad es la causa fundamental del mal olor que se puede generar en el interior del electrodoméstico.
Por último, haz una limpieza sin carga cada cierto tiempo y utilizando vinagre o bien lejía. De esta forma, conseguirás una limpieza en profundidad de la máquina y estarás alargando la vida útil de tu lavadora, con el ahorro económico que eso conlleva.
Fuente: Equipo Resiontec